Edición del grupo DEEP THROAT de IES EMILIO PÉREZ PIÑERO de CALASPARRA
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Google, el gran buscador.
¿Dónde han quedado los tiempos de consultar grandes enciclopedias, visitar bibliotecas o preguntar a un conocido para resolver las dudas que rondan nuestra cabeza? Ahora es todo tan sencillo que con un simple clic disponemos de toda la información necesaria.
26.04.2015 - Paula Sánchez Molina.
Central de Google.
La solución mágica la tienen buscadores como Yahoo, Bing o Lycos, aunque Google es el gran Houdini en este campo, con más del 90% de las búsquedas en internet. Todo empezó cuando a los universitarios Larry Page y Serguéi Brin se les ocurrió esta ingeniosa herramienta. Frustrados con las páginas de búsqueda existentes en aquel momento, ambos decidieron construir una más avanzada y más rápida. Cuando le mostraron al inversor de Sun Microsystems, Andy Bechtolsheim, su creación,quedó tan fascinado que de inmediato les extendió un cheque de 100.000 dólares. Sólo en cinco años, Google pasó a ser sinónimo de buscador en internet. ¿Quién le iba a decir a estos jóvenes que su proyecto universitario llegaría a ganar 50.000 millones de euros anuales y que se convertiría en el principal buscador? Pero, ¿podemos fiarnos de la información que Google nos proporciona?
Google a primera vista es una herramienta objetiva, pero si ahondamos un poco en ella nos damos cuenta de que esto no es así. En cierta manera nos manipula, ya que nos muestra en primer lugar las páginas que pagan por ello. Así que las páginas que más visitas tienen son a su vez las que a Google le conviene que sean. Esta posición dominante fue denunciada por la UE, por abusar de su dominio en búsquedas de internet para así favorecer sus propios productos comerciales. Esta acusación fue hecha por más de 20 empresas europeas hace cinco años. Esto podría llevar a la firma a tener que pagar multas de 5.600 millones de euros y a realizar cambios en su sistema. La publicidad en Google funciona por PPC o pago por clic. El PPC consiste en que la empresa anunciante pagará cada vez que los internautas hagan clic en su anuncio. El coste de cada clic es dictado por Google en función de varios parámetros. Suelen rondar los cincuenta céntimos por clic, dependiendo de la competencia, las palabras clave y la calidad del anuncio.
Google genera cientos de millones en España, pero factura sus ventas en el exterior desde países con baja tributación. Google Spain apenas paga impuesto de sociedades y hasta declaró pérdidas en su ejercicio fiscal de 2010. Hacienda investigó este hecho y abrió inspecciones a la sociedad. La empresa tributa en Irlanda, pero esto no acaba aquí, sino que evade los impuestos de sociedades irlandeses del 12,5%, ya que el país permite trasladar los beneficios a sociedades en el exterior, acabando estos en paraísos fiscales. Sus declaraciones fiscales no sólo están siendo investigadas en España, también en Estados Unidos o Francia.
Así que cada vez que utilizamos el buscador Google deberíamos pensar en todo lo anterior y darnos cuenta de que no estamos encontrando la información que nosotros queremos, sino la que les interesa mostrarnos. En unos años recordaremos las viejas enciclopedias y las largas horas de búsqueda por sus páginas donde podías encontrar la realidad contada por personas reales. Todo esto empieza a hacer reales las palabras de Albert Einstein: "Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad. El mundo sólo tendrá una generación de idiotas".
minutostom | 26-04-2015 05:28
Increíble este artículo, parece una verdadera periodista.